08 enero 2006


Decía un amigo refiriéndose a los blogs que son un río.
Desde un punto de vista metafórico es una buena imagen, pero mirado desde una perspectiva plástica, al menos para los no iniciados como yo, que no podemos salirnos de los márgenes y tenemos que mantenernos dentro del cauce físico virtual del que disponemos, efectivamente, son un cañón por el que una riada arrastra aspectos de lo más variopinto del imaginario humano.
En el mismo, van apareciendo diversas cuestiones que no están mucho tiempo en el mismo punto, la propia inclusión de post las hace discurrir, dando una sensación de fluir.
Lo cotidiano, como en la vida, empuja.